Una Certeza
No sé por qué escribo,
pero escribo
Supongo que ser equilibrista por los bordillos en las aceras de la barriada tenía más mérito cuando era pequeño. Como todo punto final tiene un epílogo, os cuelgo estas fotos, este vídeo (bastante mejorable) que acabo de hacer y este mensaje: Quería deciros que la Cuerda termina, pero hay muchas cosas que hacer todavía y que tenemos que ponernos a ello. Seguro que lo conseguiremos. Gracias por vuestra compañía en estos trescientos noventa... y un posts. Nos seguimos viendo por los mundos. Batid bien fuerte vuestras alas.
Deivid
3 comentarios:
Hasta siempre equilibrista....sabes que te he seguido y me has enseñado muchos de tus equilibrios, espero poder seguirte donde vayas
Gracias Jose María, GS, amigo. De no ser por ti y por Pedro, que empezásteis con la aventura bloggera, yo no me habría lanzado a subirme a la cuerda. Me acuerdo aquel verano en el Tendedero (cuerdas precisamente), cuando empezábamos a hablar del tema de los blogs. Pedro tenía el suyo y por aquel entonces lo abriste tú. Me enseñásteis, y me enseñáis, mucho. Un abrazo!
El propósito principal de la vida es ayudar a otros. Si no puede ayudarlos, al menos no nos lastimamos ellos.
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