Después de una noche mágica en Prado del Rey dediqué un par de poemas de forma anónima a mis amigos de las Letras Libres en el blog del Colectivo. Como ya me han descubierto como el autor (o me he descubierto porque no pude resistir el interrogatorio, jejeje), voy a colgarlos aquí para compartirlos con los demás enredados.
Hace unas semanas os dije que en el Colectivo de Letras Libres preparábamos un recital con el título Amores… Pues bien, el pasado 24 de julio, vivimos una noche de estreno en el serrano pueblo de Prado del Rey. Fue en la coqueta Taberna Irlandesa de Prado, junto a algunos poetas del colectivo Aldaba. Fue una noche mágica y emotiva, la que vivimos en Prado. Encontramos un árbol azul florecido de campanillas doradas, paseamos por esas calles balcones con vistas a la sierra. A pesar de los nervios y el poco público, el recital fue muy especial. Todos mis compis rayaron a mucha altura recitando poemas y contando historias. Aquí un servidor pasó bastantes nervios, pero disfrutó como un enano leyendo La Playa de las Palabras y No escribas cartas de amor. La verdad es que fue mágico, muy especial. ¿Qué tendrán esas noches azules de verano?
Noches azules.
Noches mágicas.
De árboles azules
que brotan campanillas.
que tintinean voces azules.
Ayer fuimos una banda de gatos azules de arrabal.
Sin sueño y con sueños.
Y con hambres pero
atiborrados de deseos como lámparas mágicas.
Un grupo de músicos callejeros tocando el jazz del oasis.
Ayer supimos más que nunca que no nos pueden las tempestades
ni los relojes de arena.
Y a la noche, lanzamos un barquito de letras para que vivieran libres en el azul.
Azul océano
Azul árbol
Azul noche
Azul sueños
Besos
Lo dicho, que muchas gracias por todo lo que me habéis dado, que ha sido mucho
Hace unas semanas os dije que en el Colectivo de Letras Libres preparábamos un recital con el título Amores… Pues bien, el pasado 24 de julio, vivimos una noche de estreno en el serrano pueblo de Prado del Rey. Fue en la coqueta Taberna Irlandesa de Prado, junto a algunos poetas del colectivo Aldaba. Fue una noche mágica y emotiva, la que vivimos en Prado. Encontramos un árbol azul florecido de campanillas doradas, paseamos por esas calles balcones con vistas a la sierra. A pesar de los nervios y el poco público, el recital fue muy especial. Todos mis compis rayaron a mucha altura recitando poemas y contando historias. Aquí un servidor pasó bastantes nervios, pero disfrutó como un enano leyendo La Playa de las Palabras y No escribas cartas de amor. La verdad es que fue mágico, muy especial. ¿Qué tendrán esas noches azules de verano?
Noches azules.
Noches mágicas.
De árboles azules
que brotan campanillas.
que tintinean voces azules.
Ayer fuimos una banda de gatos azules de arrabal.
Sin sueño y con sueños.
Y con hambres pero
atiborrados de deseos como lámparas mágicas.
Un grupo de músicos callejeros tocando el jazz del oasis.
Ayer supimos más que nunca que no nos pueden las tempestades
ni los relojes de arena.
Y a la noche, lanzamos un barquito de letras para que vivieran libres en el azul.
Azul océano
Azul árbol
Azul noche
Azul sueños
Besos
Lo dicho, que muchas gracias por todo lo que me habéis dado, que ha sido mucho
8 comentarios:
Azul es tu color...de tinta los poemas...bellos
saludos
El poeta Wallace Stevens aseguraba que tanto el intelecto como la imaginación son azules.
Victor Hugo decia que el arte es azul.
yo en realidad no ser que decir ,simplemente escucho un blues...
Saludos desde Montevideo.
Luis.
Para los que lean este blog, quiwero hacer llegar algo que el autor por modestia no dice. Su lectura fué genial, y, sin duda, elevó el conjunto del recital.
José María
de poemas azules está hecho el mar...
marinero.
Por fin me entero por qué la noche fue azul, menos mal. El azul y el verde son mis colores favoritos y con el interés y el gusto que le ponéis todos a lo que hacéis, vosotros mis compis del taller sois mis favoritos, seguro que no necesitáis mucho público. Es mejor poquito y bueno. ¿No crees? Y los que no fueron se lo perdieron, las lecturas en vivo son algo muy especial.
Un beso,
Loli.
Como testigo de escenario tengo que corroborar las palabras de José Maria; David no solo leyó dos joyitas literarias, sino que las leyó como le dio la gana de bien. Comparto también ese sentimiento de noche especial que creo que todos tuvimos, aunque, como ya dije en el blog de la escuela, me está oliendo a mí que ese bienestar va a ser cosa más de la compañía que del lugar.
Gracias a ti David. Un beso.
A riesgo de parecer reiterativo, tengo que decir que tu aportación influyó muy mucho en conseguir ese tono de azul tan especial que a todos nos influyó mágicamente.
Espero que no faltes nunca.
Un abrazo.
Gracias a todos. Snif, me emociono.
Besotes
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